"¿Cree usted que si lo pudiera decir con unas cuantas palabras, me tomaría el enorme y brutal trabajo de bailarlo?" (Isadora Duncan)

martes, 9 de octubre de 2007

La Bolivianita

Abro una nueva sección en mi blog que es la de mis amigos. Tengo muchos amigos. Son todos tan interesantes, coloridos y extravagantes que, la verdad, merecen un apartado.

Hoy almorcé, igual que durante todos los días martes del último mes y medio, en lo de mi amiga amiga MLT. Ella es mitad cordobesa y mitad boliviana de Santa Cruz de la Sierra. La conocí hace muchos años, cuando ambas estudiábamos en la Universidad de Córdoba. La convivencia nos hizo muy amigas, aunque la verdad es que nos parecemos poco. Pero a mí me hace mucha gracia su personalidad y básicamente me maravilla su amor propio y autoestima a prueba de cualquier cosa. Trato de emularla en sus actitudes de reina, pero reina con clase. Siempre segura de sí misma y enamoradiza.

Pues esta chica se casó a los 22, tuvo dos hijas y a poco se separó. Estuvo varios años sin convivir aunque siempre con novios. Aunque su familia es de buena posición, es de las que le puso el cuerpo a la vida. Crió a sus hijas trabajando arduamente, hasta que terminaron el colegio.

Hace dos años, cuando empezó a ver universidades para su hija mayor, contactó al primo de sus primos que vive en Buenos Aires. Supuestamente su idea era enganchármelo, para lo cual me mandó una vez a buscar un almohadón que ella misma bordó -es muy hacendosa, muy a la antigua. El primo de los primos no me dio ni cinco de bola y a mi me parecio además un nabo.

Poco tiempo despues empezó a venir muy seguido y helos aquí que ... se enganchó al cristiano. Obviamente lo primero que le dije fue: "¡¿Cómo?! ¡¿Me sacaste mi futuro novio!?" con el sólo fin de mortificarla. Nos reímos como locas. Luego de un año de encuentros a mitad de camino, viajes amorosos furtivos (todavía le miente a los padres cuando se va con algún noviete de romance), hace menos de un año me llama y me dice: "Adiviná qué". Le contesto: "Y, o te casás, o estás embarazada, o te venís a vivir a Buenos Aires.


-"Las tres cosas", dijo muy oronda, y otra vez estallamos en risas hasta que lloramos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

buenísimo! jaja
me encantó!
mxm

Cosima dijo...

olvidé mencionar que el orden fue: 'estoy embarazada; luego nos vamos de luna de miel; luego nos casamos; luego me mudo aquí'.

Marina Velez dijo...

que encanto de amiga, cosima, no imagino mejor mezcla que cordobesa y boliviana, los cordobeses son la sal de la argentina y los bolivianos la de latinoamerica!