"¿Cree usted que si lo pudiera decir con unas cuantas palabras, me tomaría el enorme y brutal trabajo de bailarlo?" (Isadora Duncan)
Mostrando las entradas con la etiqueta Chinche. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Chinche. Mostrar todas las entradas

martes, 13 de enero de 2009

Atolladero

No sé para dónde encarar.

A dónde me iré.

Qué haré.

Dónde lo haré

Linda forma de empezar un año.

Aunque el año la verdad es una convención a estos efectos totalmente irrelevante. Entre el 30 de diciembre hoy, la única diferencia es que ya estuve en las montañas, en el mar, que trabajo poco y duermo poco también (mi vecina continua con su vertedero), se me volvió a abombar el piso, y todo el mundo (eso sí) está de vacaciones.

martes, 5 de febrero de 2008

Estados Alterados de la Mente a la n

Busco alojamiento por Palermo Nuevo, Las Cañitas, Palermo Verde, Palermo.

Mi amigo y vecino del 4° ya reparó la gota que horada la piedra, al menos durante la noche. Mi vecino Ariel del 6° es un tipo muy amoroso y realmente se preocupa de no joder. Pero la conchudahijaderemilputas del 4°... Ahí lo mandé en comisión al del 4° a ver si lo resuelve. Anoche no goteó... mucho.

Pero ahora tengo el problema II y es que gracias a la conchudahijaderemilputas de mi vecina más inmediata que tiene el depto desocupado y abandonado y sucio, se le inundó su patio, por ende su depto y por añadidura el mío. En mi parquet tengo siete montañas, dos de las cuales ya eclosionaron.

Próxima estación: conseguir que el forrohijoderemilputaspeneflaccido del administrador del edificio me atienda y luego cambiar el parquet de toda la casa para lo cual me deberé mudar.

miércoles, 30 de enero de 2008

El Placer de los dioses

Jé.

Hoy mi vecino me dijo que la venganza había sido satisfecha, ya que sin ninguna causa aparente, su aire acondicionado comenzó a verter agua como siempre, sólo que esta vez... hacia adentro.

Gracias, destino.

lunes, 28 de enero de 2008

Dulce Venganza

personalized greetings

Neurus

Qué mal empecé el día. Anoche volví a mi hogar después de pasar un fin de semana muy relajante en el campo: anduve a caballo, chapoteé en la pileta, entretuve hasta que me dio la paciencia a los dos hijos bastante caprichosos de mi amiga teutona y su marido gaucho, y lo pasé muy lindo. Caminé por el medio del campo, comimos asadito. Todo muy lindo.

Al ocaso emprendí la vuelta, por rutas, autopistas y calles. Crucé la ciudad por el camino más curioso y llegué. Deshice el bolso y después de abluciones y otras gestiones higiénicas me fui a dormir. Pero no tuve éxito. Tengo dos vecinos: (1) una conchuda pretenciosa e ignorante que se jacta que esha antes vivía en Alvear (pero tiene más pinta de gato que lo que puedo o tengo ganas de escribir), en el 5° piso y (2) Pancho, en el 4° (que es un amigo mío que se mudó a mi edificio ya que tiene la curiosa costumbre de copiar mis buenas ideas sea cuales fueren). Ambos colocaron sendos aires acondicionados en la ventana del cuarto. Los cuartos todos dan a un aire y luz común. El aireluz es como un escenario. O quizá una radioemisora. Por allí se oyen con claridad prístina a las parejas que discuten, las que llevan a cabo sexo, o cocinan, o perforan paredes. Todas esas manifestaciones productivas de la vida las sobrellevo con bastante indiferencia. Pero lo que tengo mucha, mucha dificultad en soportar y me altera al borde de la razón y genera en mí ideas violentas y sangrientas, es estos dos vecinos desaprensivos que se transformaron en mis enemigos acérrimos, viertan el aire condensado en forma de gotas en mi patio, que queda al lado de mi cama, y toda la noche tener que soportar toc toc toc toc toc durante largas horas ya que los citados desaprensivos no se molestan en recoger los residuos líquidos en (1) algún recipiente y (2) un recipiente suficientemente grande para que dure toda la noche.

Hoy me siento capaz de pegarles con mis propias manos y pies y rodillas y hasta algún elemento contundente hasta herirlos de gravedad. Lo dije.

jueves, 24 de enero de 2008

Que reste-t-il de nos amours

Qué poca hombría (ni siquiera hombría de bien) está poniendo de manifiesto aquél que fuese objeto de mi amor, admiración, fascinación, deseo, afecto, ilusiones y quien sabe cuántas más emociones.

Ahora que lo veo con creciente frialdad no puedo creer mi capacidad de ver cosas que no existen. Es zorro, egoísta, insensible, melindroso, sangre de pato, sangre de horchata, pechito frío, falso, histérico, demasiado coqueto, mentiroso, taimado, y no sigo porque no merece la pena.

Ahora quiero encontrar un nuevo amor, huraño aunque brillante, igual que House M. D.

sábado, 19 de enero de 2008

El Arte... ¿Es Morirte de Frío?

A veces me siento como atravesada por una gran falla. Una falla geológica, claro. Pero de las otras también.

Mi vida consiste en hacer equilibrio entre un lado y otro de la grieta. Un pie en el hemisferio derecho y otro en el izquierdo. Muchas veces consigo un módico equilibrio. Pero otras veces siento que me voy a desplomar y desaparecer en la gran falla media. Me gustaría muchísimo dejarme caer en el lado derecho pero necesito tambien tener el pie izquierdo bien afirmado. Al menos para sentirme segura. Aunque me digan que sobrevaloro la seguridad.

Cuando libero la creatividad, el vuelo y los sueños e ilusiones, el equilibrio se arruina. Pero me siento totalmente yo misma, feliz y plena. Me olvido de mí. A veces me siento culpable de haber elegido la seguridad en detrimento de seguir mis sueños a rajatabla. ¿Por qué razón una persona podría moverse en dirección opuesta a sus sueños?

Cuando tomo conciencia de mi precario equilibrio entro en crisis. Sobre todo que como soy amiga de los extremos, me gustaría hacer una palomita doble mortal hacia el lado derecho y que todo me valiera bien poco. Y en ese proceso lo paso mal. Odio tener que trabajar en una oficina. A veces querría tener una lobotomía automática que regularmente me reseteara el cerebro y me liberara de tantos pensamientos amenazantes.

jueves, 29 de noviembre de 2007

Calma


Lo que más querría a esta altura del año y un poco de la vida es tener calma. Mucho más calma. Relativizar. No ver la vida en blanco y negro. Poder matizar mucho más. No complicarme en vano. No hacerme mala sangre por las cosas que no puedo cambiar ni dependen de mí. Y aunque fuera así, aún asi, darle a las cosas una importancia mucho más relativa. Incorporar, aprehender, entender, asumir la relatividad de las cosas. Nada es tan grave. O si es grave y no tiene remedio, pues eso. Celebrar el destino de las cosas.

También me gustaría tener el poder de resolver algunas cosas bastante prosaicas, después de haber sido capaz de mirarlas con una mirada fresca y encontrarles la mejor solución, si la tuvieran. O quedar en paz después de tanto intento.

Es una época chota.

Me gustaría ser de esas personas que (al menos en apariencia) se hacen muy muy poco problema por todo. ¿Existen? ¿Serviría el budismo? Debería volver a yoga ya mismo.

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Chinche Negra

Esto es un ejercicio mental.

Tengo una chinche negra y puta.

Me siento cansada, desmotivada, irritable.

Me gustaría hacer como el blog bodas-de-sangre y quejarse y protestar con tanto estilo. Pero no por ello menos eficaz y expresivamente.

No sé si es algo cíclico pero cada x cantidad de tiempo odio mi trabajo. Siempre me gustan mas mis trabajos cuando son nuevos y está todo por hacer. Cuando todo marcha la rutina me envenena.

Como la casi totalidad de los mortales, he de trabajar por razones económicas. Si no tuviera razones económicas trabajaría cuando se me cantara. Hasta cuando me cantara y por las horas que me cantara. Cantaría mucho. En muchas ocasiones me siento motivada e inspirada. Pero cuando me aburro me pongo fatal. Mi cerebro acostumbrado a funcionar a toda máquina se enreda con pendejadas y me hundo en un hueco sin perspectiva, girando en falso hasta la náusea. Y sobre todo por nimiedades imposibles de justificar.

En este contexto recuerdo que me está por venir y que últimamente los días previos muto en un ser insoportable, odioso, feo, verde, antipático y punzante.

Agréguesele a este lindo contexto una jaqueca incipiente pero amenazante, y varias molestias físicas.

Como diría Mafalda, ¡Puaj! Y como ella Ando con una nube negra sobre la cabeza.

miércoles, 17 de octubre de 2007

Amazona

Como una guerrera estuve todo el día combatiendo un acosador malhumor. Lo tuve a raya todo el día. No me vine caminando de la of. Pero cuando llegué me puse a cocinar. Espárragos saltados. Zucchini con cebollas. Lomo con salvia. Las texturas y los olores y la madame que canta opera en el fondo estan haciendo el resto.

Sólo me falta otro comensal.

Pero no es estrictamente necesario.

viernes, 5 de octubre de 2007

Questo Giorno Grigio

Un día medio de porra.

Me desmarco hacia un futuro incierto.

Voy a tratar de despejar la mente de tanta gana de camorra.

Las semanas se me pasan cada vez más rápido, tanto que no alcanzo a organizar nada.

Tengo un fin de semana en blanco.

Me da náusea.

Si no deja de llover no puedo pintar.

Porque pinto en el patio.

Hace mucho que no estaba decididamente malhumorada.