"¿Cree usted que si lo pudiera decir con unas cuantas palabras, me tomaría el enorme y brutal trabajo de bailarlo?" (Isadora Duncan)

domingo, 13 de enero de 2008

I Still Got Sand In My Shoes


Uno de mis consuelos existenciales favoritos es que 'nada es para siempre'. Lo malo es cuando las cosas buenas no son para siempre.

Mis trece días en la playa fueron un total deleite. Voy refinando mi vacación estival de manera que termina siendo exactamente como me gusta: despertar con el amanecer, desayunar con frutas, encremarme con un pomo entero de protección máxima, salir a caminar, tomar un poco de sol; rajar de la playa, sacarme la sal, almorzar, leer o dormitar mirando el mar, volver a la playa, sentirme un poco invisible pero tambien ignorar -por miope, pero también un poco conscientemente- a la masa humana que invade nuestro querido pueblo los mediodías. A la noche salir a comer bajo la noche estrellada en la esfera más bien negra que celeste.

Devoré el libro de Juan Forn - una muy agradable sorpresa. Me decepcionó La Grieta de Doris Lessing. Pareciera que chochea. Me mató de gusto el de J. M. Coetzee (Diario de un mal año). Voy a por más.

La primera semana con mis amigas argentinas fue más bien sin novedad. Pero la segunda, con la pandilla internacional, fue tan divertida, (empezando por las caipiroskas y siguiendo por las conversaciones y promediando por los chistes). Fue un paseo más bien memorable. ¡Cómo me las merecí! ¡Gracias a mí! ¡Gracias a la vida también! Y gracias a todos los que conozco, como decían en los programas tipo de Domingos para la Juventud.

Durante dos semanas no ví una computadora, ni un diario, ni radio, ni TV. Ni oí noticias.

Mis preocupaciones fueron:
-¡Protector 20, 30 ó 40?
-¿Chipirones ó langostinos?
-¿Caipiroska o no?
-¿Me lavo el pelo?
-¿Me baño de nuevo por tercera vez en el día?
-¿Guardo la ropa sucia o la dejo tirada?
-¿Elongo o no elongo?
-¿Qué traje de baño me pongo?
-¿A qué hora amanece?

Momentos favoritos:
-Tocar bongós y tumbadoras en la fiesta en la carpa naranja
-Encontrarme con Huberto en la ídem (cómo lo queremos, ¿no, laura?)
-Caminar por la playa todas las mañanas durante dos horas o más, cuando no hay nada más que las gaviotas, las olas y el viento y el ruido del mar. Si, shalalalala. A mi también el viento y la arena me hacen suspirar. En sentido estricto. Me doy cuenta que vuelvo a respirar profundamente cosa que en general, de acuerdo a los estudios, y como la gran mayoría, sólo hago normalmente en un 30%. Notable cómo nos cambia respirar hondo.
-Después de tres caipiroskas en la huella, aflojarme, reírme y disfrutar y mirar los colores cambiantes del mar
-El pampero soplando en la playa hace tres días: la electricidad en la atmósfera, la intensidad y fosforescencia de los colores, el miedito de los foráneos y la temeridad de los locales.
-Ver un partido de polo bastante pedorro pero en un paisaje muy muy lindo de playa laguna montes de eucaliptos y mar.
-Los chistes de Philippa, la holando-británica que parece una walkiria
-la capacidad organizativa de K
-Los chistes de P
-Mi vestidito blanco de lino puro
-Empezar el año toda vestido de puro hilo de lino blanco.


Momentos menos favoritos pero no por ello menos favoritos
-Lo agarrotadas que me quedaron las pantorrillas
-Lo hechos bola que me quedaron los pies de caminar en patas en la playa
-Que en vez de queso me traigan mermelada
-Que el jugo estuviera aguado.
-Lo caro que está.

Otras buenas:
*La iniciativa de Guzmán de concientizar a los veraneantes de mantener limpia la playa (www.farolimpio.org)
*La estrella fugaz que me hizo un guiño la última noche en el faro de josé Ignacio.

5 comentarios:

Tommy Barban dijo...

"La huella", y yo que pensé que vacacionabas como yo en en Cabo (me voy el sábado). Bienvenida.

Cosima dijo...

Mi ánimo aventurero es un poco más corto que el tuyo. Y mi capacidad logística y tiempo es menor. Igual el efecto es el mismo para mí, yendo contra la corriente. No está nada mal. Cómo lo disfruté. Me quiero volver shá.

¡Esa es la vida que me merezco! (mi amiga MMB dixit)

Anónimo dijo...

Que bueno es ir de vacaciones, no? Estuvista en Punta del Este? Es un lugar donde a mi marido le encantaria vivir , veremos
Que bueno que volviste al blog tambien y no te sacudas tanto la arena asi mantenes el recuerdo del descanso y del frescor.

Pasate, necesito tu ayuda en un little and inocent project.

Ms. Mary

Satamarina dijo...

Me alegro Cosimà! Lindo sonó todo.

saludos

Breve Uva dijo...

Me pasa igual con la frase " nada es para siempre", que logra concientizarse de que todo eso tendrá un fin pero cuando termina igual molesta. Yo me voy en unos días y espero tener unas vacaciones como me gustan tam´bién y recordarlas y contarlas como lo has hecho tu=)
besito