Así Hago Algo (ojalá pudiera)

NO tengo ni idea qué escribir, pero estoy aquí por aquel famoso ejercicio de 'just do it'. Hace muchos días estoy en un estado como de suspensión, hago lo que tengo que hacer, obedientemente, pero no estoy conectada conmigo misma.

Mi madre está convalesciente de una brutal operación y no se recupera como debería, al menos al decir de MM, el clínico estrella del hospital universitario.

Pero en los momentos aciagos, cómo relucen las acciones desinteresadas, generosas. Una amiga de la familia me ofreció hacer cualquier cosa por ayudar. En mi agotamiento se me ocurrió pedirle un shampoo para la paciente. Y ella, presta y alegremente (tan presta y alegremente como me había dicho que cuidar enfermos no, porque le da impresión) partió al otro extremo de la ciudad a entregar el vulgar detergente.

Esas cosas me reconcilian con la vida.