"¿Cree usted que si lo pudiera decir con unas cuantas palabras, me tomaría el enorme y brutal trabajo de bailarlo?" (Isadora Duncan)

miércoles, 23 de abril de 2008

Full Circle?!

Es notable cómo, con los años, me fui desprendiendo temprana y progresivamente de la religión. E inversa y proporcionalmente he ido entendiendo la razón de su existencia.

[Ahora... qué carajo iba a escribir a partir de esto... ¡no me acuerdo! ¿Se acuerdan cuando hablábamos (y pensábamos) de corrido? Estoy teniendo alucinaciones olfativas. Huelo a chicles de canela y pimienta. Ay me viene... casi...¡Me acordé!]

Con respecto a mis cavilaciones sobre si sería verdad que los seres humanos, llegada una edad determinada perderían el alma (total o parcialmente y conviniendo que la tengamos), creo haber entendido algo. Hace ya unos cuantos meses tuve un disgusto agudo que sentí como una traición de parte de una de mis personas más históricamente cercanas. Sentí que algo dentro mío se rompió. Tan fue así que nunca más retomé la relación con esa persona. Ahora está enferma y me encuentro que no me termina de afectar totalmente. Ello me llevó a pensar cuán profundo es mi resentimiento, por un lado y a cuestionarme si me he transformado en una desalmada, por otro.

Encontrándome en este punto, pues, entiendo el énfasis de la religión por inculcarnos que nos esmeremos en practicar virtudes, con el denuedo y la dedicación de un moderno corredor de carreras extremas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

no sólo la religión propone cultivar virtudes, etc. el humanismo también!

Anónimo dijo...

firmado:
mxm

Roedor dijo...

Las religiones son una peste, pero lo único bueno que tienen es que a los fiacas conceptuales como yo nos permite picotear las cositas que nos gustan, y eventualmente adoptarlas. Casi como le pasó o parece que le pasa a usted, che.

Soñar con chicles de canela y pimienta no es sueño, es pesadilla.

Cosima dijo...

El tema con la religión es que estamos expuestos a ellos antes de saber si nos gustaría estar expuestos a ella. Paradojicamente gracias a la religión también tuve exposición a otras ideas que después pude ir husmeando.

Hay unos chicles de canela y menta que son riquísimos. Tienen un envoltorio rojo. No sé si eran de Wrigleys.

Unknown dijo...

La religión pretende arreglar lo que no se puede arreglar y que aceptemos lo que no se puede aceptar y sólo sirve para generar culpas y autocomplacencias. En general no me resiento con nadie pero me da igual si a algunos les pasa un camión por encima.